MI LUGAR FAVORITO

"Se dice que una ogresa vivía entre sus aguas y se alimentaba de sus truchas. Aquellas aguas eran su hogar, y como tal, las protegía. Un día, un joven que acampaba por la zona con sus amigos lanzó una piedra al salto de agua que se encontraba frente a él; un gesto irrespetuoso que no pasó desapercibido. Cuenta la leyenda que la ogresa apareció por la noche en su tienda e intentó arrastrarlo de sus pies. La suerte, en forma de amigos que tiraban en dirección contraria, lo salvó, aunque el joven estuvo por 30 días encamado y enfermo". Jóns Árnasonar (The Collection of Folklore)

Más o menos una hora y cuarto de coche nos separan del lugar al que queremos ir. Los 10 primeros minutos son por la Ring Road, que enseguida dejamos atrás para coger dos carreteras secundarias realmente bonitas. Voy yo conduciendo y se complica hacer fotos esta vez. Volveré. 

La conducción se hace muy cómoda hasta los últimos 20 minutos, cuando entras en una carretera sin pavimentar (qué raro), pero que en verano es muy sencilla de solventar, que se hace pesada. 

¿El destino? Una de las caídas de agua más altas de Islandia y uno de los sitios más bonitos que he podido ver aquí. 

Frente a nosotros tenemos más de 100m de caída de una cascada que demuestra una gran fuerza.

Lo curioso es que no se encuentra sola. A pocos metros un salto de agua vecino hace que la vista sea aún más increible. 

Dejamos atrás este lugar y volvemos a Hveragerði, pero a mi no me apetece volverme a casa, así que decido conducir un poco más y veo un "atardecer" lleno de colores en lo que ha pasado a ser mi lugar favorito aquí. El momento es muy bonito a pesar de los defensivos "Kría", un ave muy cansina que no duda en atacar si te acercas demasiado a sus nidos aunque solo estés de paso. Enseguida los dejo atrás y me quedo un rato en soledad escuchando poco más que el viento, el mar y algún ave. Todo para mí.